
PUNTOS DE FE DE LA IGLESIA DE DIOS DEL 4to. MANDAMIENTO
La naturaleza de la palabra de Dios es tan profunda y extensa, que como seres finitos no podemos comprenderla en toda su plenitud a causa de nuestra naturaleza humana, pero YHWH en su misericordia nos ha revelado parte de su sabiduría y nos ha mostrado su palabra para que la comuniquemos a todos aquellos que tienen sed de saber quien es El y quien es su Hijo y mediante su poder que es Su Espíritu Santo no solo ha hecho la creación material si no aun la restauración del hombre mediante su hijo Jesucristo.
¿Quién subió al cielo, y descendió? ¿Quién encerró los vientos en sus puños? ¿Quién ató las aguas en un paño? ¿Quién afirmó todos los términos de la tierra? ¿Cuál es su nombre, y el nombre de su hijo, si sabes? Prov. 30:4
DIOS EL PADRE
Creemos que Dios el Padre es la suprema deidad del universo, y que toda la creación le alaba (1 Corintios 8.6; Juan 20.17; Job 38.7). Creemos en Él como ha sido revelado por Su Hijo y como Él mismo se ha manifestado en la Creación (Juan 1.18; Salmos 19.1). Creemos que por Su naturaleza, el Padre es: Eterno (Sin principio ni fin), Omnipotente, veraz, Justo, Santo, Perfecto, Amor e Invisible a la naturaleza humana (Salmos 45.6; Lucas 1.37; Romanos 3.4; Apocalipsis 16.5; 4.8; Mateo 5.48; 1 Juan 4.8; 4.12). Creemos que ha derramado de Su Santo Espíritu entre los creyentes para guiarlos, enseñarlos, redargüirlos y producir frutos en ellos, y sellarlos para la resurrección de vida eterna (Hechos 2.17; Juan 16.13; 14.26; 16.7, 8; Gálatas 5.22, 23; Efesios 1.13, 14; 4.30). Creemos que Dios es un ser perfecto, que hace distinción entre el bien y el mal (Génesis 3.22; Proverbios 6.16-19).
Creemos que El Dios Eterno para poder ser Padre, engendro a su Hijo Jesús antes de todas las cosas. Salmo 2:7 Isaías 66:9 pues no se puede ser padre si no se han engendrado hijos
JESUCRISTO EL HIJO DE DIOS
Creemos que Jesucristo es el Hijo Unigénito de Dios y que debemos poner nuestra fe en él y creer en Él como lo presentan las Escrituras. Creemos que el Hijo fue engendrado por el Padre antes de la creación de todas las cosas visibles e invisibles, es el único gen de Dios col. 1:16 ; y que hubo un tiempo por decir así que el hijo de Dios no existió hasta que fue engendrado por su Padre en la eternidad, salmo 2:7 hebreos 1:5 que es de la misma esencia del Padre, la imagen de Su sustancia y el resplandor de Su gloria (Colosenses 1.15; Juan 1.1; Hebreos 1.3). Creemos que el Hijo es el ejecutor de la creación de Dios, que El es el que le dio principio al principio de todas las cosas y que las sustenta con Su Palabra y que ha de renovarla al final de los tiempos (Colosenses 1.16; Hebreos 1.3, Hechos 3.19-21). Creemos que el Hijo es quien se manifestó al pueblo de Israel como su Dios y que también es el Mesías prometido (Isaías 43.1-3; 1 Corintios 10.4; Isaías 7.14; 9.6, 7; Juan 1.41). Creemos que el Hijo fue enviado al mundo para salvación del hombre, creemos que para venir al mundo se despojó de su divinidad y se hizo carne, que fue engendrado por el poder de Dios como un ser humano en una virgen llamada Maria (Miriam), de quien nació según la carne (Juan 3.16; 8.42; Juan 18:37 Filipenses 2.6, 7; 1 Juan 4.2, 3; Lucas 1.34, 35; Gálatas 4.4 ). Creemos que como hombre, el Hijo vivió en santidad, que nunca se halló en Él maldad ni mentira; creemos que como niño estuvo sujeto a sus padres, que como judío observó la ley de Moisés y que como humano logró la perfección, dándonos ejemplo (1 Pedro 2.21-23; Lucas 2.51; Gálatas 4.4, Efesios 4.13). Creemos que el Hijo, conforme a las Escrituras, murió un día miércoles 14 de Nisán; creemos que fue colocado en la tumba antes de ponerse el sol de aquel día, en la víspera de la Pascua de los judíos; que permaneció en la tumba tres días y tres noches, como una prueba de su mesianidad, creemos que resucitó un día sábado antes de ocultarse el sol (1 Corintios 15.3; Daniel 9.27; Juan 19.31, 42; Mateo 12.38-40, Mateo 28.1-6). Creemos que después de su resurrección, el Hijo tiene la misma gloria de la cual gozó junto con el Padre desde antes de la fundación del mundo; creemos que en su naturaleza divina ascendió a los cielos y está sentado a la diestra del Padre y que es nuestro intercesor ante Él (Juan 17.5; Filipenses 2.9-11, Colosenses 2.9, Hebreos 10.12; Romanos 8.34).
SU ESPIRITU SANTO El Espíritu Santo (Hechos 2:4) es la esencia o poder de Dios que Cristo prometió enviar a los elegidos (Juan 16:7). No es una persona pero si la extensión del poder viviente de Dios. Es el medio por el cual nosotros nos volvemos participantes de la Naturaleza Divina (2Pedro 1:4), siendo llenos del Espíritu Santo (Hechos 9:17; Efesios 5:18) y por consiguiente todos Hijos de Dios SI CREEMOS (Job 38:7; Romanos 8:14; 1Juan 3:1-2) y coherederos con Cristo (Romanos 8:17; Gálatas 3:29; Tito 3:7; Hebreos 1:14, 6:17; Santiago 2:5;). Es dado por Dios a aquellos que lo piden (Lucas 11:9-13) y que obedecen a Él, morando en aquellos que guardan los mandamientos de Dios (1Juan 3:24; Hechos 5:32). El Espíritu Santo es el consolador que conduce a los siervos de Dios a toda la verdad (Juan 14:16-17,26). El Espíritu Santo confiere el poder para dar testimonio (Hechos 1:8). Administra dones, como está registrado en 1Corintios 12:7-11 y nos ayuda a tener el fruto del Espíritu, como está descrito en Gálatas 5:22-23 y no es dado por medida (Juan 3:34 RSV; Romanos 12:6). Es el medio por el cual Dios puede volverse finalmente todo, en todos (1Corintios 15:28; Efesios 4:6). ) El Espíritu Santo opera desde antes del bautismo. El Espíritu atrae al individuo a Dios a través de Cristo. El Espíritu puede apagarse (1Tes. 5:19) siendo abandonado o afligido (Efesios 4:30) y así admite de ganancias y pérdidas en el individuo. El fruto del Espíritu Santo es amor, según Gálatas 5:22. Por consiguiente, si nosotros no nos amamos, el Espíritu Santo no es evidente. El Apóstol Pablo marco esta diferencia en 1ª Cor 3: 1-3 DE manera que yo, hermanos, no pude hablaros como á espirituales, sino como á carnales, como á niños en Cristo. Os dí á beber leche, y no vianda: porque aun no podíais, ni aun podéis ahora; Porque todavía sois carnales: pues habiendo entre vosotros celos, y contiendas, y disensiones, ¿no sois carnales, y andáis como hombres?
LOS DONES DEL ESPIRITU SANTO Creemos en los dones del Espíritu Santo tal y como están indicados en 1ª. Cor 12:1-31 1ª. Cor.14:1,12, 26,37 si no se ajusta a esta regla bíblica no se reconoce que los dones sean motivados por Espíritu Santo.
Num. 18:7 Mas tú y tus hijos contigo guardaréis vuestro sacerdocio en todo negocio del altar, y del velo adentro, y ministraréis. Yo os he dado en don el servicio de vuestro sacerdocio; y el extraño que se llegare, morirá. Los dones de Dios son perfectos y dados a sus sacerdotes, en La Iglesia de Dios somos sacerdotes, (Apoc. 5:10 por lo tanto debemos tener la guía de Su Espíritu Santo si no es así somos extraños y moriremos.
LA SANGRE DE CRISTO Creemos que la Sangre de Cristo fue derramada para la remisión de los pecados y la expiación fue hecha en la cruz. (Mateo 2:28; Hechos 20:28; Romanos 5:6-13, 3:25; Lucas 24:47; Hechos 10:43; Filipenses 2:8-12; Colosenses 1:19-23; Tito 2:13-14; 1a Corintios 15:1-5).
LA FE EN JESUCRISTO Creemos que el sacrificio del Señor Jesucristo es efectivo en cada persona cuando ésta acepta a Jesucristo como Hijo de Dios, como su Salvador y Señor en todos sus aspectos, (Hechos 16.31; Juan 3.36, 20.31; Lucas 2.11, Romanos 10.9). Creemos que todo creyente ha de tener plena fe en la vida, muerte, resurrección e intercesión, salvadora de Jesucristo (1 Pedro 2.21, 22, Romanos 5.10; Romanos 4.25; 14.9; Hebreos 7.25, 1 Juan 2.1).
GOBIERNO DE DIOS Dios es la cabeza de Cristo y Cristo la cabeza del varón y el varón la cabeza de la mujer, por lo tanto el gobierno de Dios ordena que todo hombre cristiano no debe cubrir su cabeza en respeto al Eterno Dios y ordena que la mujer cubra su cabeza en honor y respeto al gobierno de Dios, quien no haga estas recomendaciones esta en contra de su gobierno.( 1ª Cor 11:1-16)
SU NOMBRE Y EL BAUTISMO Creemos que el Nombre de Dios Eterno, el Padre YHWH es JESUS ya que este nombre es sobre todo nombre, El Nombre de la Divinidad, Efes. 1:21 Hech. 4:12, es el Nombre ordenado del cielo a su hijo Lucas 1:26-35, Jesucristo heredo de su padre el Nombre debido a su absoluta y total obediencia Filip. 2:8 Hebreos 1:2,4 Filip. 2:9-10, Jesucristo es el YO SOY del A.T. Exo. 3:14 Juan 8:24 POR ESTO EL BAUTISMO DEBE SER MINISTRADO EN ESTE NOMBRE, EN EL NOMBRE DE JESUCRISTO, POR QUE EN ESTE NOMBRE ES EL PERDON DE LOS PECADOS.
HECHOS 10:43
A éste (JESUCRISTO) dan testimonio todos los profetas, de que todos los que en él creyeren, recibirán perdón de pecados por su nombre. (Así que cuando se bautiza la persona se aplica la sangre de Jesucristo y solo en ese instante porque sin derramamiento de sangre no hay perdón de pecados Heb.9:22 Hech. 2:38, después nos apegamos a que nuestras faltas futuras siguen siendo perdonadas por la sangre de Jesucristo 1Jn 2:1). El arrepentimiento es condicional para el bautismo y el recibimiento del don del Espíritu Santo, el bautismo infantil es contrario a la Biblia. La condición previa del arrepentimiento fue enfatizada por la misión de Juan el Bautista quien fue el precursor al bautismo del Espíritu Santo en Cristo (Marcos 1:4,8). Juan declaró que Cristo bautizaría con el Espíritu Santo y con fuego. Es necesario ser bautizado para el perdón de pecados
EL PLAN DE SALVACION La Caída de la Humanidad, Se creó la humanidad a la imagen y semejanza de Dios (Génesis 1:26-27). Adán y Eva fueron maldecidos debido a su desobediencia (Génesis 3:16-19). Como resultado de esta rebelión, el pecado y, por consiguiente, la muerte vino en toda la humanidad (1Corintios 15:22; Romanos 5:12).
LA SALVACION DE LA HUMANIDAD
Dios no quiere que ninguno perezca (2Pedro 3:9). Para que la humanidad pudiera escapar la penalidad del pecado que es la muerte, Dios instituyó un plan de salvación que involucra un sacrificio en la muerte y resurrección de Su hijo Jesucristo (Juan 3:16). El plan es de una cosecha secuencial de la cual Cristo es el primogénito de aquellos que han muerto (1Corintios 15:20).
MEMBRESIA DEL REINO DE LOS CIELOS
Creemos que un miembro de la Iglesia es todo aquel que ha sido llamado por Dios y ha aceptado el santo llamamiento y se ha bautizado en el nombre de Jesucristo, además de que viva en armonía con la doctrina del Señor Jesucristo y en comunión con la Iglesia, que es el cuerpo de Cristo (Hechos 2.41, 42; 1 Corintios 10.16, 17; Gálatas 3.27-29). La salvación está condicionada y se pierde si se cae en alguna de las siguientes faltas: a) Apostasía; b) Vida inmoral; c) Indisciplina; d) Provocación de divisiones (2 Juan 9, 10; 1 Corintios 5.11, Hebreos 13.17; Tito 3.10).
LA BIBLIA COMO VERDAD INSPIRADA
Cristo dijo: escrito está, No sólo de pan vivirá el hombre, sino de toda palabra que sale de la boca de Dios (Mateo 4:4; Lucas 4:4). La Biblia es conocida como La Escritura (Daniel 10:21), y se dirige hacia la salvación de la humanidad y la manifestación del poder de Dios (Éxodo 9:16; Romanos 9:17). El medio de la salvación es Jesucristo (Romanos 10:11) quien fue predicho por la Escritura desde Moisés y los profetas (Lucas 24:27), la profecía siendo la Escritura (Mateo 26:56; Rom. 1:2). Toda Escritura está inspirada por Dios y es útil para enseñar, para reprobar, para corregir, y para entrenar en rectitud, para que el hombre de Dios sea perfecto, enteramente instruido para toda buena obra (2Timoteo 3:16).
Las Escrituras en el tiempo de Cristo y los apóstoles fueron el Antiguo Testamento (Mateo 21:42; Marcos 12:10; Hechos 17:2). El Antiguo Testamento es la Escritura referida como inspirada de Dios en 2Timoteo 3:16. El Nuevo Testamento es adicional al Antiguo Testamento. No reemplaza al Antiguo Testamento, el Nuevo Testamento es el complemento del Antiguo.
ANTIGUO Y NUEVO TESTAMENTO Creemos que tanto el A. T. y el N. T. de la Biblia son validos ya que ambos testifican del Mesías Jesucristo como el Hijo de Dios que vendría a redimir a la humanidad, encontrándose en ellos reglas morales y de ética cristiana
LOS DIEZ MANDAMIENTOS
La Iglesia se compromete a esforzarse en guardar los Diez Mandamientos, como se encuentran en Éxodo 20:1-17 y Deuteronomio 5:6-21. estos Mandamientos son los que nos señalan el pecado, no los observamos para ser salvos, si no que nos esforzamos en observarlos por que ya somos salvos y en agradecimiento al Amor que Dios mostró por nosotros a través de Jesucristo. Cuan Buena es su Ley.
Creemos que esta ley esta vigente, puesto que es la que señala el pecado, si no existiera esta ley entonces no existiría el pecado y así el predicar el Evangelio seria obsoleto. Mateo 5:17-19 1ª. Juan 3:4 Sant. 2:10-12
El SABADO
El Sábado del séptimo día debe ser guardado (de Éxodo 20:8-11; Deut. 5:12-15) como un mandamiento expreso del Señor y uno de los diez mandamientos. Estos son para siempre estatutos intactos para todas las personas. Marc. 2:27 El Sábado es santo, Dios mismo lo santifico Gen. 2:3 Es un pacto perpetuo entre las personas de Israel y es para siempre una señal entre ellas y Dios, reconociéndolo como el creador (Éxodo 31:15-16). Todos los cristianos somos Israelitas espirituales. Por consiguiente, el sábado es una señal entre Dios y Su pueblo por todo el tiempo. El sábado es una delicia y debe ser honrado como el Día Santo del Señor. No es un día de placer ocioso sino de sagrada asamblea (Isaías 58:13-14).
Nuestro Señor guardó el Sábado durante su vida (Marcos 6:2, Luc. 4:16). Los apóstoles guardaron el sábado. (Hech. 13:14 , 13:42-44 El Señor en el milenio introducirá de nuevo el Sábado, las Lunas Nuevas y los Días Santos de nuevo por fuerza de ley en la restauración milenaria de los últimos días bajo el gobierno del Mesías, castigando las naciones que no lo cumplan (Isaías 66:22-23; Zacarías 14:16-19).
En Isaías 56:6-7 Cristo lo profetizo para todos los hombres. Y á los hijos de los extranjeros que se allegaren á Jehová para ministrarle, y que amaren el nombre de Jehová para ser sus siervos: á todos los que guardaren el sábado de profanarlo, y abrazaren mi pacto,
Yo los llevaré al monte de mi santidad, y los recrearé en mi casa de oración; sus holocaustos y sus sacrificios serán aceptos sobre mi altar; porque mi casa, casa de oración será llamada de todos los pueblos. (versión 1909)
ENFATIZAMOS EL 4º MANDAMIENTO DE EXODO 20:8 POR QUE ES EL MAS OLVIDADO POR LOS CRISTIANOS.
LA IGLESIA
Creemos que la Iglesia tiene su origen en Dios el Padre y que Él estableció a Su Hijo como el fundamento (Juan 12.50; Mateo 16.15-18; 1 Pedro 2.4-8; 1 Corintios 3.11). Creemos que por tener como fundamento al Señor Jesucristo, la muerte no ha de prevalecer contra ella y tampoco ha de sufrir deterioro o contaminación doctrinal (Mateo 16.18; Efesios 5.25-27, Judas 3). Creemos que la predicación del Señor Jesucristo fructificó y sus primicias fueron 144 000 israelitas, y que en lo posterior el Evangelio fue predicado entre los gentiles, e donde Dios también ha tomado pueblo (Apocalipsis 14.1, 4; Mateo 10.5, 6; Hechos 13.46; Apocalipsis 7.9).
EL MEMORIAL DE LA MUERTE DE JESUCRISTO
Creemos que la forma bíblica de conmemorar la muerte redentora del Señor Jesucristo, es participando de la cena del Señor, celebración ordenada por Él mismo (1 Corintios 11.26; Mateo 26.26-28). Creemos que el memorial es un acto emblemático, significando la comunión verdadera entre cada participante y Dios (1 Corintios 10.15-17). El memorial debe celebrarse cada año en la fecha indicada, al finalizar el 13 de Nisan y principio del 14 de Nisán del calendario bíblico (1 Corintios 11.23; Mateo 26.17-20; Éxodo 12.1-6). Primero lavamos nuestros pies como lo ordeno Cristo (Juan 13 ) y después participamos de los emblemas sagrados , pan sin levadura y jugo de uva sin fermentar que son símbolos del cuerpo de Jesús, en la Cena del Señor sólo participan los miembros bautizados en el Nombre de Jesucristo de la Iglesia de Dios que vivan en santidad y que hayan permanecido a través de todo el año en verdadera comunión con Dios y con la Iglesia (1 Corintios 10.17; 11.27-29, Hebreos 10.24, 25). Creemos que si el creyente se abstiene de participar de la cena del Señor, ya sea por negligencia o indignidad, está cortándose de la comunión con Dios y con la Iglesia.